La sequía es un problema recurrente en España, especialmente en los últimos años. La falta de lluvias, las altas temperaturas y la sobreexplotación han provocado que los embalses y acuíferos disminuyan drásticamente sus niveles de agua, generando preocupación en la población y en los sectores económicos que dependen del suministro de agua.

La situación de sequía ha llevado a una disminución de las reservas de agua en España. Según datos del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, la reserva hidráulica española se encuentra al 46,7% de su capacidad total en marzo de 2023, una cifra preocupante si tenemos en cuenta que el año pasado a estas alturas la reserva era del 62,5%.

Los acuíferos, que son reservas subterráneas de agua dulce, también han sufrido las consecuencias de la sequía en España y de la sobreexplotación.

Situación actual de los acuíferos en España

En España hay alrededor de 1.100 acuíferos, que representan el 60% del agua dulce disponible en el país. De estos acuíferos, el 70% se encuentran en un estado de sobreexplotación, lo que significa que se está extrayendo más agua de la que se puede recargar naturalmente. Además, el 50% de los acuíferos están en un estado de deterioro, lo que significa que la calidad del agua está empeorando.

Según un análisis de la organización ecologista Greenpeace el 30% de los acuíferos se encuentran en mal estado químico, o sea que se ha alcanzado un nivel de contaminación por encima de los niveles máximos para la salud humana; y el 14 % se declara en mal estado cuantitativo y químico.

Muchos acuíferos se han agotado, como los Ojos del Guadiana y las Tablas de Daimiel. Esto es debido al cambio climático que reduce la capacidad de recarga de los acuíferos y a la extracción excesiva de agua para consumo humano, agricultura y otros usos.

Además, la contaminación de los acuíferos por actividades humanas como la agricultura intensiva y la industria también ha afectado a su calidad de agua y ha limitado su capacidad de suministro.

Impactos de la sobreexplotación de los acuíferos

La sobreexplotación de los acuíferos tiene varios impactos negativos en el medio ambiente y la sociedad. En primer lugar, la extracción excesiva de agua puede reducir la cantidad y la calidad del agua disponible en el acuífero, lo que puede afectar a la flora y la fauna locales.

En segundo lugar, la sobreexplotación de los acuíferos puede llevar a una reducción en la disponibilidad de agua dulce para el consumo humano y la producción de alimentos, así como los pequeños y medianos productores que trabajan de manera sostenible.

En tercer lugar, la sobreexplotación de los acuíferos puede provocar un aumento en los costes de extracción del agua, ya que se requiere una mayor energía para extraer agua de acuíferos cada vez más profundos.

Finalmente, la sobreexplotación de los acuíferos puede tener un impacto negativo en la economía, ya que muchos sectores, dependen del agua dulce para su funcionamiento.

¿Qué medidas se pueden tomar para garantizar una gestión sostenible del agua?

Para hacer frente a la sequía en España, es urgente y necesario adoptar medidas de gestión sostenible de los recursos hídricos.

Esto implica la adopción de medidas de ahorro y eficiencia en el uso del agua en diferentes sectores, por ejemplo, sistemas de riego más eficientes, la reutilización del agua y la educación de la población sobre el uso responsable del agua.

Otra solución importante es fomentar la utilización de tecnologías más eficientes en la agricultura, la industria y otros sectores y fomentar la innovación en la gestión del agua.

Se debe proteger y restaurar los acuíferos para garantizar su capacidad de suministro de agua y aumentar el presupuesto destinado a la gestión forestal.

Por último, es esencial promover la cooperación y la coordinación entre las autoridades y los usuarios del agua promocionando acuerdos para compartir los recursos hídricos y incentivando la participación ciudadana.

¿Qué medidas pueden adoptar los hoteles?

Los hoteles pueden desempeñar un papel importante en la gestión sostenible del agua y en la reducción de su impacto en el medio ambiente.

En SLEEP´N llevamos a cabo una serie de acciones que te animamos a adoptar para que entre todos consigamos mejorar la situación del agua:

Implementar sistemas de ahorro de agua: se pueden instalar sistemas de bajo flujo en los grifos, duchas y baños para reducir el consumo de agua. Nosotros medimos el caudal en cisternas, lavamanos y duchas.

Sensibilizar a los huéspedes: se puede educar a los huéspedes sobre la importancia de la gestión sostenible del agua y motivarlos a contribuir a la reducción del consumo. Nosotros adoptamos un sistema de concienciación del tiempo de uso en IND. (Estudio realizado en colaboración con Surrey University UK).

Implementar programas de reutilización de toallas y sábanas: esto no solo reduce el consumo de agua y energía, sino que también reduce la cantidad de productos químicos utilizados en la limpieza. Nosotros incentivamos con donaciones a reforesta si se renuncia al arreglo de la habitación.

Utilizar productos de limpieza ecológicos: se pueden utilizar productos de limpieza ecológicos que sean menos perjudiciales para el medio ambiente y la calidad del agua. En SLEEP´N la limpieza general la realizamos con hidrólisis y los amenities son Eco. certificados.

Gestionar correctamente los residuos: con la gestión de residuos sólidos y líquidos se minimiza el impacto en el medio ambiente y la calidad del agua. Nosotros reciclamos y pesamos los cuatro tipos de basura dedicando media hora diaria de un empleado para ello.

El problema del agua es un problema real y preocupante y requiere la adopción de medidas urgentes y efectivas. Es un problema que va más allá de la falta de lluvias, es también un problema de mala gestión y de irresponsabilidad que nos está llevando a graves  problemas de abastecimiento y nos debe poner en alerta.

Tenemos que entender que no podemos seguir gastando agua sin ningún tipo de control y que es un problema y responsabilidad de todos.

Por nuestra parte, los hoteles podemos tomar medidas significativas para mejorar la situación de los acuíferos y la gestión sostenible del agua. Estas acciones no solo reducen el impacto ambiental del hotel, sino que también mejoran la experiencia del huésped y pueden generar ahorros en costos a largo plazo.

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